Te espero...
A veces no entiendo como siento así por ti. No tiene
límites, no conoce ni de reglas ni de leyes.
No he podido perderme en esos ojos de color canela, no he podido sentir con mis
manos el mapa de tu piel, no he podido llevarme tu aroma a casa después de un
beso...
No hay explicación, tal vez magia. Tanto creer en ella que
al final hemos conseguido sacar al conejo de la suerte de la chistera.
Cierra los ojos por un momento, escucha como el mar te mece
entre sus olas, y ahí, en esa playa, sentirás mi mirada clavada en tus ojos,
mis manos acariciando tu piel y mis labios arrancándote todos esos suspiros.
Saca todas esas ideas malas, eres más de lo que he soñado y
adoro tu forma de ver la vida, de querer a los demás, de sentir tus sueños e ir
a por ellos, tus miedos y dudas que hacen de ti algo más humana. Y no hablemos
de tu mirada, tu sonrisa, tu cuerpo, tus manos, tu voz, tu arte...
Teniendo todas esas credenciales, ¿cómo no me voy a enamorar de ti?
Yo te presento las mías, no es mucho, pero es todo lo que
tengo...
Quererte como nadie ha sabido quererte, apoyar tus sueños y
juntos alcanzarlos, defender tu libertad a capa y espada con risas y dichas, y
dar absolutamente todo por ti. No es mucho repito, pero es de verdad.
Sabes bien que soy yo ese que imaginas al despertar cuando
la luz baña tus pupilas. Ese con el que sueñas al acostarte, que pinta de azul
tus días.
Y juntos escucharemos la lluvia caer mientras nos comemos a
besos en el sofá.
Y juntos estremeceremos nuestros cuerpos al candor de la luna.
Y juntos nos entenderemos con solo mirarnos, paseando descalzos por la playa.
Y juntos viajaremos al borde de la galaxia con cada abrazo.
Y juntos cocinaremos felicidad y sonrisas a partes iguales.
Y juntos bailaremos, cantaremos y vagaremos descubriendo mundos, paisajes y
culturas.
Juntos secuestraremos el tiempo quitándole las agujas al reloj.
Mientras tanto, yo te espero aquí, junto al mar, para
traerte el verano que has soñado.
Comentarios
Publicar un comentario